Un nuevo metamarco para la medición holística del desempeño de sistemas alimentarios y agrícolas
Nuestros sistemas alimentarios son centrales para la existencia humana, pero también son factores causantes del cambio ambiental. Por lo tanto, no es de sorprender que personas de todas partes del mundo traten de medir, monitorear y evaluar los varios componentes de los sistemas agroalimentarios para determinar qué tan bien funcionan y en qué podrían mejorar.
Sin embargo, los sistemas agroalimentarios son extremadamente complejos y difíciles de medir, y, hasta hace poco, muchos parámetros se habían concentrado solo en los aspectos económicos. “Los babilonios guardaron información sobre los precios de los productos agrícolas desde el año 500 a. e. c., y estos indicadores todavía los encontramos en la mayoría de las bases de datos internacionales, como la FAOStat”, detallaron los coautores del nuevo documento de trabajo titulado Desarrollo de evaluaciones holísticas de sistemas alimentarios y agrícolas: Un metamarco para usuarios de parámetros, quienes pertenecen a diferentes organizaciones como el Centro para la Investigación Forestal Internacional y el Centro Internacional de Investigación Agroforestal (CIFOR-ICRAF) y Statistics for Sustainable Development (Stats4SD) [Estadísticas para el Desarrollo Sostenible].
Su trabajo forma parte del Programa de Transición Agroecológica para la Construcción de Sistemas Alimentarios y Agrícolas Resilientes e Inclusivos (TRANSITIONS), cuyo objetivo es facilitar la transición agroecológica de los agricultores, con base en conocimiento climático, a escalas significativas en países de ingresos bajos y medios (PIBM). Una de las tres áreas clave de TRANSITIONS es el área de Parámetros, cuyos resultados preliminares se recogen en el documento de trabajo. El objetivo general es apoyar a quienes estén elaborando marcos de evaluación y parámetros para la medición holística del desempeño de sistemas alimentarios y agrícolas, para crear igualdad de condiciones con otros enfoques de desarrollo agrícola.
Dicho enfoque es importante porque, como se suele decir, se mide lo que importa. “Con el tiempo, las propiedades del sistema que se miden mejorarán con decisiones de gestión, mientras que las propiedades que no se miden cambiarán positiva o negativamente dependiendo de los factores que las impulsen y su correlación con las propiedades medidas”, asegura el documento. “Por lo tanto, durante mucho tiempo, investigadores y activistas han argumentado que necesitamos medir mucho más que la producción y los aspectos o dimensiones económicas de los sistemas agroalimentarios”.
Esto es particularmente importante cuando se evalúan los beneficios relativos de enfoques holísticos como el de la agroecología, en comparación con la agricultura intensificada de manera convencional. “Los sistemas agroecológicos se han formulado con el objetivo de ofrecer beneficios ambientales y sociales, no solamente beneficios económicos, y para ser sostenibles en el largo plazo”, explican los autores. “Evaluar solamente la producción de corto plazo o en términos económicos no tiene sentido bajo este enfoque. De la misma forma, evaluar sistemas intensificados de manera convencional, sin incluir sus efectos sociales y ambientales de largo plazo, lleva a la degradación de estos aspectos”.
Dada la evidente necesidad de evaluaciones más holísticas, hay una “reciente proliferación” de diversos marcos disponibles, diseñados para satisfacer una amplia gama de objetivos. Si bien los avances logrados son laudables, es difícil, para los futuros evaluadores, decidir qué sistema utilizar.
“La tarea de desarrollar un marco de evaluación holística y la proliferación de parámetros y herramientas disponibles hacen que, con frecuencia, el posible evaluador sienta que debe medir todo, en todos lados, simultáneamente, pero con tiempo y recursos limitados”, señalaron los autores.
Por ello, los autores proponen un “metamarco” que ayude a las personas que buscan datos sobre sistemas agroalimentarios a diseñar de forma eficaz una evaluación que responda a sus necesidades. El marco se compone de cuatro ejes o conceptos principales:
- El Destino: el objetivo de contar con una evaluación holística de un sistema agroalimentario
- La Brújula: principios para diseñar una evaluación
- El Entorno: las características y elementos del sistema de evaluación
- Trazar la Ruta: los pasos para desarrollar una evaluación
En última instancia, el enfoque apoyará a que los usuarios de parámetros encuentren un camino ante la complejidad de los enfoques disponibles y seleccionen algo que satisfaga sus necesidades, y al mismo tiempo, ayudará a igualar las condiciones para los sistemas agroalimentarios sostenibles.
Christine Lamanna, Richard Coe, Mary Crossland, Lisa E. Fuchs, Carlos Barahona, Brian Chiputwa, Levi Orero, Beatrice Adoyo y Matthias Geck son los autores del documento de trabajo.
Descargue el documento en formato pdf aquí.
Acknowledgements
The TRANSITIONS programme is implemented by The Alliance of Bioversity and CIAT, CIFOR-ICRAF, IRRI, IWMI, The Transformative Partnership Platform on Agroecology, and the University of Vermont. It is generously funded by the European Union and managed by IFAD.
Photo by Tri Saputro/CIFOR
This blog is written by Monica Evans and is also available on Forests News.